Excéntrica como siempre, Lady Gaga destrozó e incendió el escenario en los American Music Awards. Claro, todo fue parte de la presentación en la premiación a lo mejor de la música estadounidense.
Con una malla color piel, que daba la apariencia que estaba desnuda, y una máscara que aparentaba una criatura de "El Laberinto del Fauno", nombre de su disco, Gaga interpretó a su tema "Bad Romance".
Todo iba bien, aunque los que ya conocen a Lady Gaga sabían que el musical no terminaba allí. De pronto, la intérprete comenzó a destrozar parte de su escenografía y, en un instante, se calmó para dirigirse a su piano para cantar "Speechless".
Al final comenzó a golpear con unas botellas de agua el piano, mientras el escenario se incendió.
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